
Según la Organización Mundial del Trabajo (OIT) la temperatura en un entorno laboral con trabajos ligeros con movimiento, debe de estar situada entre 14 y 25 ºC para tener unas condiciones de confort en el puesto de trabajo, de no ser así, no se cumpliría la normativa y las condiciones no serían las adecuadas Lograr esa temperatura con el mínimo coste y unas bajas emisiones de gases de efecto invernadero es un reto, en la mayoría de las ocasiones estos espacios están pobremente aislados, cuentan con una altura media de 4 m y la apertura de puertas para el tránsito de materiales es constante.
Natural Fire ha realizado la instalación de un GNF 300 (300Kw) para la calefacción de una nave industrial de 3000 m. El combustible utilizado es hueso de oliva, que además de estar libre de gases de efecto invernadero y ser una energía renovable, tiene un precio un 70% inferior que el gasóleo, alternativa que los propietarios barajaron para la instalación.
La canalización del aire caliente proveniente del GNF se ha realizado mediante el uso de mangas textiles, como la que se observa en la foto, siendo una alternativa más económica e igual de efectiva que las tradicionales de tubo galvanizado. Esta instalación es otro ejemplo de la gran versatilidad de la gama GNF, válida tanto para calefacción de grandes espacios como para aplicaciones industriales.